Mas para vosotros los que teméis mi nombre, nacerá el Sol de Justicia, y en sus alas traerá Salvación; y saldréis, y saltaréis como becerros de la manada.
A diario ignoramos a Dios y fijamos nuestros propios planes. Nuestras elecciones egoístas no nos traen vida, sino que en efecto, nos han conseguido una sentencia de muerte.
Dios comprende que la humanidad lucha con el pecado. Entiende que estamos frustrados por cómo terminaron las cosas. También sabe que si fuera por nosotros, no siempre haríamos lo correcto. Entonces, Dios irrumpió y creó un camino para que encontremos el perdón y volvamos a comenzar.
¿Cómo fue que Dios hizo esto? Envió a su Hijo Jesucristo a vivir en medio de nosotros y a enseñarnos un mejor camino.
Jesús fue perfecto en todo sentido, pero la humanidad no estaba contenta con la idea de Dios. Aunque Jesús nos enseñó a amar a Dios y amarnos unos a otros, los hombres malvados planearon su muerte en una cruz. Se lo llevaron detenido y juzgaron su caso de manera injusta. Las mismas personas a las que Jesús les enseñó, sanó y dio de comer, obligaron al gobernador romano a asesinarlo en una cruz.
Jesús murió para cargar nuestros pecados sobre sus hombros:
Él pagó el precio por las cosas malas que nosotros hicimos. Como murió en nuestro lugar, podemos encontrar el perdón de Dios. ¡Pero la historia no termina ahí!
Jesús pagó el precio de nuestros pecados muriendo en esa cruz. Tres días después resucitó. Cientos de testigos vieron a Jesús con vida antes de ser llevado al cielo. Ellos oyeron la promesa de Jesús, de que si lo aceptamos aquí en la tierra podremos estar con Él en el cielo cuando muramos.
Ahora, Jesús está dispuesto a perdonar nuestros pecados. Él conoce nuestras debilidades. Nos ofrece abrir un camino para nosotros, pero solamente si se lo pedimos.
Si quieres ser libre de tus pecados, si quieres volver a empezar, pídele que te perdone. No es tan complicado.
Simplemente habla con Dios y dile:
“Gracias Dios por amarme y enviar a tu Hijo a morir en la cruz por las cosas malas que yo he cometido. Estoy arrepentido por las cosas que te han lastimado. Elijo hacer a Jesús el Señor de mi vida. Ayúdame a ser la clase de persona que quieres que sea. En el nombre de Jesús, amén”.
Habiendo entrado Jesús a Jericó, iba pasando por la ciudad. Y sucedió que un hombre llamado Zaqueo, que era jefe de los publicanos, y rico, procuraba ver quien era Jesús, pero no podía a causa de la multitud, pues era pequeño de estatura. Y, corriendo delante, se subió a un sicómoro para verlo, por que había de pasar por allí. Cuando Jesús llego a ese lugar, mirando hacia arriba lo vio, y le dijo:
-Zaqueo date prisa, desciende, por que hoy es necesario que me hospede en tu casa.
Entonces el descendió a prisa y lo recibió gozoso. Al ver esto, todos murmuraban, diciendo que había entrado a hospedarse a casa de un hombre pecador. Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor:
-Señor, la mitad de mis bienes doy a los pobres; Y si en algo he defraudado a alguien, se lo devuelvo cuadruplicado.
Jesús le dijo:
-Hoy ha venido la salvación a esta casa, por cuanto él también es hijo de Abraham, por que el Hijo del hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.
¿Quien era Zaqueo?
Era un Publicano o Recaudador de Impuesto, ¿Que sera un Publicano-Recaudador de Impuestos? Los recaudadores de impuestos, también conocidos como publicanos, se mencionan muchas veces en la Biblia (sobre todo en el Nuevo Testamento), de hecho trabajaban para los romanos como recaudadores de impuestos y se les describe generalmente como codiciosos, que pedian más dinero del que debian. En el Evangelio de Lucas, Jesús se compadece del recaudador de impuestos Zaqueo, provocando la indignación de la multitud, por el hecho de que Jesús prefiriera ser el invitado de un pecador antes que serlo de otra persona más respetable o "justa"ante la sociedad.
Pero Zaqueo no solamente era un Recaudador de impuestos, era el Jefe de los publicanos.
También era un Hombre pequeño de estatura. Zaqueo tenia muchas Ataduras en forma de vicios.
Cuando Jesús llego a Jericó la multitud se agrupo, Zaqueo procuraba ver a Jesús, pero su tamaño no se lo permitía...
Hay 3 Cosas que hizo Zaqueo que cambiaron su Vida:
1.- Zaqueo busco las alturas para ver a Jesús, El subió a un Sicomoro para poder ver a Jesús
¿Que es un Sicomoro? Árbol de tronco amarillento, erecto y dilatado, copa muy ramificada y esférica, hojas verde oliva, ovadas y rugosas parecidas a las de la morera, flores verdosas y frutos pequeños y comestibles; puede alcanzar hasta 20 metros de altura; crece en zonas de clima cálido y árido.
Dios pide que busquemos las alturas.
Colosenses 3:2: Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.
Apocalipsis 3:10 Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardare de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero para probar a los moradores de la tierra.
¿Que es un Morador? Persona, Animal Que vive habitualmente en un lugar determinado.
Lo que quiere decir aquí en Apocalipsis 3:10 es: A los que han guardado la palabra de Dios el los va a ayudar en el día de prueba.
Pero a los Moradores de esta tierra que son los que dicen que la vida es una y que se aferran a esta tierra. Esos son las personas que van conforme a la carne que les importa mas las riqueza o los bienes que la comunión con Dios.
La Tierra es temporal, Zaqueo aunque era un pecador, con su primera acción agrado a Dios (El busco las Alturas).
Jesús miro a Zaqueo y le dijo: Zaqueo baja de alli que tengo que ir a tu casa.
2.- Lo Segundo que hizo Zaqueo fue: Que el abrió las puertas de su casa con un gran Gozo. Hay que ser diligentes al llamado de Dios, Hacer lo contrario detiene las Bendiciones, Dios quiere que cambiemos nuestra actitud.
Dios también nos habla en la conciencia.
¿Que es la Conciencia? se define, en términos generales, como el conocimiento que uno tiene de sí mismo y de su entorno, pero también se refiere a la moral o bien a la recepción normal de los estímulos del interior y el exterior.
Dios nos habla en la conciencia: Puede que nos advierta de algo que hagamos que no esta bien o que nos diga que oremos.
Hay momentos donde empezamos a endurecer el Corazón, Pudiéramos pensar y hasta creer que esto es injusto de parte de Dios , pero es allí donde se pone de manifiesto la soberanía de Dios, no es que el Señor endurezca una persona por predestinación o por azar, Dios considera seriamente las actitudes, el mira nuestras reacciones, como respondemos a su voz, a su llamado, el es claro cuando dice; cuando oyeres su voz no endurezcáis vuestros corazones.
Dios endurecerá el corazón cuando constantemente nos habla y se resiste y vuelve hablar y se sigue resistiendo, Dios podría convencerlo con quebrantamiento para que cedan pero el Señor permite ese endurecimiento por respeto a la libre voluntad. Cuando el Señor determina que una persona sea endurecida no es por que no haya tenido oportunidades, al contrario de ello es porque se le han dado muchas oportunidades, si algo se distingue del Señor es que es un Dios de oportunidades, y el hombre con terquedad desperdicia esas oportunidades.
Zaqueo atendió el llamado.
Jesús entro a la casa de Zaqueo y todos murmuraron diciendo que Jesús iba a entrar en la casa de un hombre pecador, lo que decía la gente era verdad, pero Jesús lo sabia que no entro en la casa de un Dignatario, detrás de esto había un propósito en la vida de Zaqueo.
¿Que es un Dignatario? Persona que ocupa un cargo o puesto de mucha autoridad, prestigio y honor.
¿Que es un Mandatario? Persona que gobierna un país o desempeña un alto cargo político
3.- La tercera cosa que marco la vida de Zaqueo fue que Zaqueo se puso en pie y dijo que iba a dar la mitad de sus bienes a los pobres, y a todos los que había engañado se lo iba a dar cuadruplicado.
Zaqueo prefirió la Presencia de Dios que a los bienes y deseos del mundo.
Efesios 4:22: En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que esta corrompido por los deseos engañosos.
Hay que despojarnos del viejo Hombre.
Zaqueo comenzó a cambiar, Tenemos que cambiar hay que mostrar frutos de arrepentimiento.
Luego que Jesús vio lo que Zaqueo hizo Dijo: Hoy ha venida la Salvación a esta casa.
Cuando una persona acepta a Jesús es Salvo pero Juan 8:31-32 nos dice que: Dijo Jesús a los judíos que habían creído en el:
-Si vosotros permanecéis en mi palabra seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres.
No todos los que aceptamos a Jesús somos libres ¿por que?
El ser salvos no se lleva a cabo sólo por recitar algunas palabras especiales. Ni tampoco decimos una frase mágica y listo, ¡somos salvos! O simplemente decimos: “Jesús por favor, perdóname” y de repente todos nuestros pecados son borrados simplemente porque hemos pronunciado alguna frase especial. Esto no se trata de una fórmula para salvación o un proceso de encantamiento que de alguna manera nos limpia y nos permite posteriormente ir a pecar.
La Biblia dice:
Romanos 6:1-2: “¿Qué, pues, diremos? ¿Perseveraremos en el pecado para que la gracia abunde? 2 En ninguna manera. Porque los que hemos muerto al pecado, ¿cómo viviremos aún en él?”
Desafortunadamente hay quienes acusan a los cristianos de tener licencia para pecar. Ante esto, la Biblia dice:
Romanos 3:8: “¿Y por qué no decir (como se nos calumnia, y como algunos, cuya condenación es justa, afirman que nosotros decimos): Hagamos males para que vengan bienes?”
Note que Pablo dice que aquellos que acusan a los cristianos de hacer lo malo están siendo calumniadores. La salvación es un pedirle a Dios por la limpieza de nuestro pecado, perdón y arrepentimiento genuino, de forma que no volvamos a pecar. Esta petición es una confesión con un corazón arrepentido por nuestra desesperanza delante de Dios y una aceptación del sacrificio de Jesús para nuestro beneficio. Esta salvación es simultánea con un arrepentimiento sincero lo cual es un volverse del pecado; más no, el seguir haciéndolo.
Recibir a Jesús en nuestros corazones significa que tenemos que reconocer primeramente que somos pecadores y que somos incapaces de salvarnos a nosotros mismos o de apaciguar a Dios de alguna manera. Reconocemos delante de Dios que estamos indefensos y que somos merecedores de condenación. Pero con esto, también reconocemos que Jesús es el único que pagó la pena por nuestros pecados. Entendemos que no hay forma posible que podamos hacer las cosas rectas delante de Dios por nuestras propias obras. Cuando aceptamos a Jesús como nuestro Salvador estamos aceptando el llamado al arrepentimiento por nuestros pecados. Dios, entonces, nos llama Sus Hijos:
Juan 1:12: “Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios”
Nuevas Criaturas
Aún más, cuando recibimos a Cristo, somos regenerados, cambiados, nacidos de nuevo. Esto significa que hay algo diferente en nosotros. Algo nuevo nos ha sucedido. Esta es la razón por la cual Jesús dice:
Juan 3:3: “De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios.”
Ser nacido de nuevo significa que algo nuevo ha sucedido en nosotros. Este “algo” es el cambio en nosotros, el cual es, el resultado de la regeneración:
2ª Corintios 5:17: “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.”
Las cosas viejas eran las pasiones y deseos pecaminosos. La esclavitud en la que estábamos es rota cuando nacemos de nuevo. Una vez nacidos de nuevo, el Espíritu Santo viene a habitar en nosotros, convenciéndonos de nuestros pecados:
Juan 16:8: “Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.”
Esta convicción de pecados ocurre en el creyente y es un método que el Señor usa para ayudarnos a dejar de pecar. Cuando no somos salvos somos libres de salir y hacer lo que queramos, lo cual está mal. Pero ahora que somos salvos debemos darle gloria a Dios y demuestra Su obra de regeneración en nosotros en la medida en que nos alejamos del pecado. Esta es la razón por la cual Romanos 6 dice:
“¿Qué, pues, diremos? ¿Perseveraremos en el pecado para que la gracia abunde? 2 En ninguna manera. Porque los que hemos muerto al pecado, ¿cómo viviremos aún en él?”. (vv. 1-2).
“¿Qué, pues? ¿Pecaremos, porque no estamos bajo la ley, sino bajo la gracia? En ninguna manera.” (v. 15).
Y una vez más, en 1ª Corintios 10:31 se dice:
“Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.”
¿Cómo podemos darle gloria a Dios si salimos y pecamos? No podemos hacerlo. De hecho, cualquiera que diga que es un Cristiano y continúa en sus pecados sin buscar arrepentimiento y sin convicción, es simplemente, un mentiroso. La Biblia claramente declara:
1ª Juan 2:4-6: “El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él; 5 pero el que guarda su palabra, en éste verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él. 6 El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo.”
Jesús, dice la Biblia, claramente llevó nuestros pecados en su cuerpo en la cruz (1 P 2:24) y que la salvación es un regalo que recibimos por fe (Ro 6:23; Ef 2:8-9). Cuando aceptamos a Jesús, estamos aceptando Su sacrificio por nuestros pecados, sólo por fe. Estamos creyendo en Jesús sólo para salvación. Cuando esto hacemos, el Espíritu Santo entra a vivir en nosotros. Ya que el Espíritu Santo nos convence de pecado, justicia y juicio (Jn 16:8) entonces, buscamos complacer a Dios y evitar el pecar. Éste, es un resultado natural del ser salvos.
Aceptar a Jesús no significa que podemos ir por ahí pecando en todo momento. Esto significa que le hemos dado la espalda al pecado y que somos nuevas criaturas que sean darle gloria a Dios. Recuerde: no debemos usar la gracia de Dios para seguir pecando.
Zaqueo conocio la verdad y lo llevo a tomar una decision de dejar todo atras y seguir a Jesús.
Hasta que no pasaron los frutos de arrepentimiento Jesús no declaro la salvación a la casa de Zaqueo, pero Zaqueo dio frutos y llego la Salvación a la casa de Zaqueo...
Debido a lo comunicado en la ultima noticia el Blog vuelve a la dirección original: http://eleselsoldejusticia.blogspot.com/ y ya que es una dirección mas buscada en las fuentes de trafico decidí volver a usarla... Dios los Bendiga... Pronto un nuevo especial¡¡¡
Bueno duramos un tiempo sin publicar y la novedad que es que este Blog a partir de hoy no informara de la Iglesia y ahora sera por mi cuenta y ademas ahora las canciones presentadas llevaran una reflexión mas elaborada y un titulo independiente.
Hoy les traigo un vídeo musical de Funky pero mas de estilo tradicional se llama Todavía y me ministro mucho es muy bonita y nos habla de que nunca se olvidaría de su fe en Dios y que que no importa que Dios tampoco nos dejara de amar y te quiero decir Señor ¡Te amo Todavía y no quiero enfriar ese sentimiento, pues nunca se me olvida que vivo gracias a ti!
También disculpen que no pude conseguir un vídeo mejor pero la canción es lo bueno.